Para poder ahorrar de forma efectiva hay que tener activos. Y más importante: hay que saber distinguirlos de los pasivos. De la confusión entre activos y pasivos derivan muchos de los problemas que afectan las finanzas personales de los emprendedores.

Esta confusión viene dada muchas veces por los preconceptos errados que tenemos sobre ciertos elementos. Por ejemplo: ¿Las viviendas constituyen un pasivo o un activo? ¿Es el empleo un activo? ¿Guardar dinero en los bancos es mejor que invertirlo?

Sigue leyendo para conocer la respuestas a estas preguntas y aprender qué son los pasivos, qué son los activos y cómo mejorar tus finanzas personales.